lunes, 23 de septiembre de 2013

El único momento es... AHORA


Hoy ha llegado a mi este corto, me lo ha enviado la mamá de un niño al que doy clases. Un amor de mujer, y su hijo un amor de niño.

Me ha parecido un vídeo genial pero sobre todo muy real, y digno de hacer una reflexión sobre el. 


Nos pasamos la vida esperando, esperando el fin de semana, esperando los puentes, esperando las navidades, esperando que se acaben los examenes, esperando cada día que se acaben las jornadas laborales, esperando que llegue el verano, esperando casarnos, esperando tener hijos, esperando encontrar el trabajo de nuestros sueños... Esperando y esperando.

Y se nos olvida que las cosas van llegando, y aunque llegan seguimos esperando. Yo cuando era pequeña deseaba cumplir 15 años, cuando cumpli 15 deseaba cumplir 20, esperaba tener el carnet de conducir, cuando lo tuve esperaba tener coche, esperaba empezar la universidad, cuando la empecé esperaba acabarla. Y las cosas van llegando. Miro atrás y no me creo que ya tenga 21 años, a puntito de cumplir 22.

Se nos olvida vivir el ahora, el momento presente, se nos olvida vivir cada día como si fuera el último, vivimos la rutina como rutina, y esperamos que llegue algo grande creyendo que a partir de ese momento seremos más felices.

En esta etapa de mi vida estoy aprendiendo a vivir el día a día, porque tengo tantas cosas que hacer que si intentase planificarlo todo a largo plazo me acabaría volviendo loca, he decidido vivir y disfrutar el presente y cuando decides algo y lo introduces de verdad en tu vida, empiezas a verlo por todos los sitios. Cuanta más energía gastas, más energía generas. Estoy viviendo varias situaciones que me demuestran que lo mejor para ser feliz es vivir cada día con la intensidad que merece y hacer de cada día un día único. Y mira por donde hoy llega a mi este vídeo.

Mi humilde consejo: vive cada día como si fuera el último. El único momento es ahora.

Cuestión de prioridades.

Buscando entre mis trabajos y reflexiones de primero de carrera, para compartir alguno de ellos por aqui, me he encontrado con varios que iré colgando más adelante, pero entre todos me ha llamado mucho la atención esta canción de Melendi, que me llevó a reflexionar mucho sobre las prioridades en la vida.


Aquí os la dejo:


Que las palabras, sean más lentas que las balas 
que las baladas, ya no sean para dos 
que tus latidos, que antes eran de cualquiera, 
ahora solamente suenan por amor.

                                                           
Que el prisionero ya no pose con cadenas
que las melenas no son solo rock and roll, 
que una moneda nunca compre un sentimiento, 
pues si de algo me arrepiento es de haber comprado tu amor.

Y que la falda sea tan corta como quieras,
que el problema es del que mira y no encuentra explicación.


A mi me preocupan más los niños que mueren de hambre,
pero si me apuras me dan más pena sus madres
perdonen sus gobernantes esta mía ignorancia,
no entiendo que en pleno año 2000
a mil kilómetros de aquí
se están muriendo de hambre. 


Que la metralla se convierta en chocolate
para comerla o fumarla, que mas da.
Que mi hijo sea del sexo que sea, 
tenga una salud de hierro 
y se parezca a su mama.

Y que la vida no se pierda en las pateras
que los desastres naturales se repartan. 
Que perro flaco parecen todo son pulgas
nunca he visto un maremoto arrasar quinta avenue.



Que las ropas estén sucias, o estén rotas 
casi nunca están reñidas
con tener buen corazón.



A mi me preocupan más los niños que mueren de hambre
pero si me apuras me dan más pena sus madres
perdonen sus gobernantes esta mía ignorancia
no entiendo que en pleno año 2000
a mil kilómetros de aquí
se están muriendo de hambre.

Se están muriendo de hambre
y no les damos de comer
nos lo gastamos todo en tanques para podernos defender 
¿¿De qué?? ¿¿De quién??
De vuestros putos ombligos, mercenarios, arrogantes 
que se den por aludidos son los putos asesinos, que
los estáis matando de hambre...











jueves, 19 de septiembre de 2013

Bienvenidos

¡Bienvenidos a mi blog!


La frase que aparece debajo del título de mi blog, cobra mucho más sentido escuchando esta canción de Tarzán, una de mis películas favoritas, por tanto como nos enseña, por tanta belleza que transmite, por la manera en la que demuestra que no somos tan diferentes los hombres de los animales, todo lo contrario, son muchas veces peores los hombres que los animales. Por la forma en la que demuestra que todos somos iguales, y porque desde mi punto de vista es una película indispensable para la vida de un niño.

Soy estudiante de Magisterio de Primaria, además soy  profesora particular y niñera, para mi esta es la profesión más bonita que existe, por eso la elegí. 
Este es un sitio en el que principalmente encontraréis temas sobre educación. Intentaré actualizar lo más a menudo que pueda sobre diversos temas y experiencias personales que me llamen la atención para compartir por aquí. 


¡Un besito! ¡Hasta pronto!